Un recorrido por sus rincones escondidos.

Monte Oiz, una cima por descubrir

Elevándose sobre el horizonte, el Monte Oiz es una prominente joya natural que sobresale en el paisaje de esta comarca. Esta imponente montaña, con una altitud de 1,026 metros, ofrece no solo una vista panorámica impresionante, sino también una oportunidad única para los amantes del senderismo y la escalada.

Se dice que desde su cumbre se puede obtener la mejor vista de toda Bilbao Bizkaia, asi que si te gustan las vistas naturales, este es tu lugar.

Las rutas que serpentean por sus laderas ofrecen una experiencia gratificante para los aventureros que buscan desafíos y paisajes inolvidables.

Además, cuenta la leyenda, que Oiz era uno de los montes preferidos de la diosa Mari y que cada siete años Mari abandonaba Anboto para trasladarse a Oiz.

El Valle de Atxondo y la Vía Verde de Arrazola, un paseo entre historia y naturaleza

Entre Elorrio y Abadiño se encuentra el precioso Valle de Atxondo, en las faldas del Anboto. Un valle repleto de paisajes verdes y caseríos de piedra centenarios, se trata de un rincón natural que no puedes dejar de ver si te acercas a Durangaldea. Ya sea para pasar el día o un fin de semana, es un lugar fascinante para visitar.

En el mismo Valle, puedes explorar la encantadora Vía Verde de Arrazola, un antiguo camino ferroviario reconvertido en un sendero para caminar o andar en bicicleta.

Este camino serpentea a través de exuberantes paisajes, pasando por antiguas estaciones de tren y puentes de piedra que narran historias del pasado industrial de la región.

Lo que era la vía del tren, se ha convertido con el tiempo en la vía verde y actualmente se puede hacer a pie el mismo recorrido que hacía aquella. Se trata de un recorrido de 5 kilómetros desde el barrio de Apatamonasterio hasta la antigua estación de Arrazola. Es un lugar donde el tiempo parece detenerse, permitiendo a los visitantes sumergirse en la serenidad de la naturaleza mientras descubren los encantos ocultos de la comarca.

Santuario de Urkiola y el Mirador de las Tres Cruces, un encuentro con lo sagrado y lo natural

Enclavado en las alturas de la Parque Natural de Urkiola, el Santuario de Urkiola es un lugar de profundo significado espiritual y belleza natural. Rodeado por picos imponentes y frondosos bosques, este santuario ofrece un refugio de paz y contemplación para aquellos que buscan un momento de desconexión.

Desde sus puertas, se abre un sendero que conduce al Mirador de las Tres Cruces, un punto de vista privilegiado que ofrece una vista panorámica incomparable de los valles y montañas que se extienden hasta el horizonte. Aquí, los visitantes pueden maravillarse ante la grandeza de la naturaleza mientras reflexionan sobre la belleza y la armonía del mundo que los rodea.

Planifica tu próxima aventura

Ya sea que seas un entusiasta del senderismo, un ciclista o simplemente un amante de la naturaleza en busca de nuevos horizontes que explorar, Durangaldea te espera con los brazos abiertos. Con sus impresionantes montañas, valles serenos y rincones escondidos, esta comarca ofrece una experiencia inolvidable para todos los que se aventuren a descubrir sus tesoros naturales.

¡Así que prepárate para emprender un viaje de descubrimiento y maravilla, y sumérgete en la belleza inigualable de esta comarca!