Historia de los gasolinos de la ría

La necesidad de permitir la navegación de grandes barcos hasta el centro de Bilbao ha dificultado la comunicación entre ambas márgenes de la ría, solo solventada en parte con la construcción de complejos puentes.
Para salvar esta limitación, desde finales del siglo XV existen noticias de botes de remos que transportaban personas de una margen a la otra la ría del Nervión-Ibaizabal.

Un poco de historia

  • La ría ha sido el motor económico del Gran Bilbao desde hace siglos. La necesidad de permitir la navegación de grandes barcos hasta el centro de Bilbao ha dificultado la comunicación entre ambas márgenes de la ría, solo solventada en parte con la construcción de complejos puentes. Para salvar esta limitación, surgieron a ambas orillas del cauce pequeños botes, primero a remo y desde comienzos del siglo XX a motor, el gasolino.

  • De hecho, desde finales del siglo XV existen noticias de botes de remos que transportaban personas de una margen a la otra la ría del Nervión-Ibaizabal. En aquella época, y posteriores, era un servicio que se abría a subasta pública y estaba regulado por las ordenanzas municipales. Entre otras cuestiones, se establecía la obligación de que no pudiera transcurrir más de media hora entre un servicio y otro y, además, los boteros debían ser educados y amables con el pasaje.

  • Desde mediados del siglo XIX, con la llegada masiva de familias atraídas por la pujante industria, las poblaciones ribereñas se multiplicaron en tamaño, aumentando las 22 necesidades y demanda de nuevas infraestructuras de transporte. Así, mientras se construían nuevos puentes, nuevas líneas de ferrocarril y tranvía, nuevas carreteras, etc. los botes cumplieron un papel fundamental en el transporte de personas trabajadoras a las fábricas.

  • Eran embarcaciones de boteros particulares, al principio de reducida capacidad y movidas con remos. De hecho, se cuenta que, si una persona se ofrecía a remar para llevar el bote de una margen a la otra, no tenía que pagar el pasaje. Posteriormente, cuando los motores sustituyeron a los remos como medio de propulsión, se les empezó a denominar “gasolinos”.

  • La construcción de modernas infraestructuras, el uso generalizado del coche, y el declive industrial hicieron que el tráfico de botes, gasolinos, disminuyera considerablemente. Actualmente, de los más de una decena que cruzaban la ría regularmente en los años 70, sólo quedan operativas dos líneas regulares: la que comunica Urban-Barakaldo con Erandio y la que comunica Portugalete con el barrio getxoztarra de Las Arenas.