“Los montes de Bizkaia son mi casa”. Estas palabras de nuestra Nature Lover Lexuri Crespo definen perfectamente el sentimiento de las personas que vivimos en Bilbao Bizkaia. Las botas de monte, la mochila y los bocadillos para reponer fuerzas en paseos por la naturaleza forman parte de quienes, como Lexuri, disfrutamos de los montes que nos rodean. Porque Bilbao Bizkaia es un territorio natural, lleno de vida silvestre y de rincones mágicos por descubrir en rutas que siguen el trazado de antiguas sendas medievales o los caminos que recorrían los trenes mineros, escalando e internándose en colinas que guardan profundas y sorprendentes cuevas y ascendiendo a cimas cargadas de simbolismo y tradiciones.

Nuestra Nature Lover, por ejemplo, ha crecido a los pies del monte Serantes, en la marinera Santurtzi, donde cada Lunes de Pascua toda la localidad sube hasta la cumbre en la singular Romería de Cornites para pasar el día y reponer fuerzas con el cornite, un pan con chorizo y huevo duro. Otra tradición montañera en Bilbao Bizkaia es subir al monte para despedir el año que se acaba o darle la bienvenida al nuevo. Las cumbres cercanas a Bilbao como Pagasarri o Ganekogorta, son el destino de mendizales - personas aficionadas a la montaña - de la capital de Bizkaia, aunque el lugar más tradicional para ver el amanecer del primer día del año es el Gorbeia, la meca del montañismo de Bizkaia.

Coronada por una cruz de más de 17 metros de alto en una estructura que recuerda la arquitectura del hierro del Puente Bizkaia, existen varias rutas para alcanzar la cumbre. Algunas, como la que parte desde Pagomakurre, en Areatza, son un agradable paseo entre campas, bosques, peñascos y laderas, mientras que otras, como la que comienza en Ubide, discurren por barrancos y collados aptos para montañeros y montañeras más experimentadas como nuestra Nature Lover Lexuri Crespo, que comenzó a correr por las montañas de Bizkaia en carreras cortas y “como se sentía tan libre, tan a gusto consigo misma” hoy en día ha encontrado su sitio en las exigentes carreras por montaña de ultrafondo.

El monte Gorbeia se alza a 1.481 metros sobre el nivel del mar en el centro del Parque Natural del Gorbeia, un verdadero paraíso para la vida salvaje y para Nature Lovers. Practicar el senderismo por las sendas que recorren todo el parque natural es la mejor terapia para desconectar y adentrarse en los rincones más sorprendentes de la zona, como el Biotopo de Itxina, un auténtico refugio para la vida natural al tiempo que un espectáculo para la vista, con sus formaciones de roca que parece que se alzan para tocar el cielo. La magia de los mitos de las leyendas surgidas en los montes también se puede sentir en lugares como el Ojo de Atxular, un túnel natural en las rocas formado por la erosión y que sigue despertando aún la imaginación de quienes lo visitan en sus caminatas a la sombre del Gorbeia.

A Lexuri también le gusta perderse en los montes de Bizkaia y “conocerlos a través de rutas sin fin”, por lo que le encanta acercarse hasta Enkarterri y disfrutar de las muchas rutas en bicicleta que recorren la comarca más al oeste de Bizkaia. A Lexuri le emociona subir a golpe de pedal hasta el Kolitza desde Balmaseda, la primera villa de Bizkaia fundada en 1199 y que atesora un impresionante patrimonio cultural. La subida hasta los 879 metros de altura del Kolitza es abrupta y con pendientes escarpadas entre robles y hayas, pero las vistas merecen el esfuerzo. Desde la cima, junto a la ermita románica de San Roque, que parece volcada sobre un precipicio, Balmaseda y los valles vecinos asoman a nuestros pies. Además, si prestamos atención, todavía oiremos los ecos de un cuerno. No en vano el Kolitza es uno de los cinco montes bocineros desde donde, en la Edad Media, se llamaba a las juntas generales que se celebraban en las Casas de Juntas de Avellaneda y Gernika.

Una ruta ciclista más sencilla y prácticamente llana es la que cruza Enkarterri siguiendo el camino dejado por un antiguo tren minero, la Vía Verde de los Montes de Hierro. Cruzando ríos y túneles, entre riscos en los que se pueden ver los imponentes alimoches, pasando junto a antiguas ferrerías con más de 2.000 años de antigüedad y cargaderos de mineral y minas de donde se extraía el hierro que dio fama a la zona, la ruta en bicicleta cruza puentes y humedales donde crían truchas y salmones, poblados mineros abandonados, bosques y campas en las que pacen el ganado de nuestros baserris (caseríos), hasta llegar al mar en Muskiz, donde enlaza con la Vía Verde de Itsaslur en el borde de un acantilado sobre el Cantábrico.

Otra experiencia única para internarse en la naturaleza y disfrutar de la calma que se respira en los montes de Bizkaia es montar a lomos de un caballo y dejarse llevar por caminos poco conocidos de Durangaldea, en el corazón de las montañas de Bizkaia. Nuestra Nature Lover Lexuri, a la que le gusta “enseñar a la gente lo que tenemos a nuestro alrededor, ya que es mucho”, no podía dejar pasar la oportunidad de disfrutar del recorrido ecuestre Zaldi Gorri, una ruta circular a caballo que rodea toda la comarca de Durangaldea y el Parque Natural de Urkiola en tres etapas. Por caminos sin asfaltar y al tranquilo ritmo de las monturas, durante el recorrido Lexuri ha disfrutado con “un paisaje que deja sin aliento, especialmente cuando miras hacia Urkiola” y la historia y el patrimonio de las localidades de la comarca.

Además del Parque Natural de Urkiola, Durangaldea ofrece rutas y actividades que harán las delicias de cualquier Nature Lover: la Ruta Mikeldi por los barrios más auténticos de la comarca y sus baserris - nuestros caseríos- , calzadas medievales, casas torres y lugares de leyenda; la Vía Verde de Arrazola, un tranquilo paseo en un entorno rural a los pies del Anboto; la Ruta del Vino y el Pescado, el antiguo camino medieval para intercambiar el vino de La Rioja con el pescado de los puertos de Bermeo y Ondarroa y que discurre por Durangaldea a lo largo de dos etapas pasando por Otxandio, Urkiola, Mañaria, Izurtza, Durango, Garai y Berriz, o la subida al monte Oiz, situado en el centro geográfico de Bizkaia y otro de los cinco montes bocineros del Territorio Foral. Como Lexuri, las y los Nature Lovers más aventureros encontrarán en Durangaldea actividades que desafiarán sus límites: bicicleta de montaña, marchas de montaña guiadas, escalada, espeleología, barranquismo, orientación, … Un paraíso para la aventura.

“Los montes de Bizkaia son mi casa”. Estas palabras de nuestra Nature Lover Lexuri Crespo definen perfectamente el sentimiento de las personas que vivimos en Bilbao Bizkaia.