Existen mil maneras de acercarse a descubrir Bilbao Bizkaia, cientos de lugares en los que disfrutar de lo mejor de nuestra tierra para todos los gustos y edades. Por libre, en pareja, con la familia o con la cuadrilla, Bilbao Bizkaia ofrece una gastronomía variada y deliciosa, paisajes naturales que dejan sin aliento, un mar indómito que ha esculpido acantilados y playas, vibrantes ciudades con una colosal oferta cultural y de ocio, tradiciones y fiestas que conservan el saber y el sabor del pasado, y un entorno único en el que disfrutar a tope de la vida.

La actriz Melani Olivares, conocida sobre todo por su inolvidable papel como Paz en la serie de televisión ‘Aida’, ha tenido la suerte de poder compartir un viaje por Bilbao Bizkaia en compañía de un buen amigo, el galardonado actor de cine, teatro y televisión y cantante Asier Etxeandia, un bilbaíno de pura cepa que la ha acompañado a conocer y disfrutar de todo lo que le ofrece el Territorio.

Como no podía ser de otra manera, el viaje de Melani por Bilbao Bizkaia comienza poteando por el Casco Viejo de Bilbao, paseando de bar en bar tomando unos vinos, zuritos de cerveza o txakolis mientras degusta los mejores pintxos que pueblan las barras de las tabernas. Es lo que Asier llama “el sagrado poteo de Bilbao”. El corazón histórico de la capital de Bizkaia es uno de los lugares de referencia para probar gildas o tigres, los pintxos de bacalao o de txangurro, las mil y una variedades de tortilla, imaginativos bocaditos creativos o los tradicionales de puerro y de huevo.

Aunque a Melani le parezca sorprendente, los pintxos suelen ser la antesala de la comida o la cena, y descubrir los deliciosos txipirones en su tinta, uno de los platos bandera de una gastronomía basada en la tradición, en los productos de primera calidad y en el saber hacer de las cocinas de los restaurantes de Bilbao Bizkaia. Desde las recetas más típicas como el bacalao al pil pil y el marmitako a las últimas creaciones de los fogones más imaginativos, comer en Bilbao Bizkaia es un placer para todos los sentidos. Una experiencia gastronómica

Siguiendo su recorrido por Bilbao, Asier lleva a Melani a recorrer en bici el paseo creado junto a la Ría del Nervión. Antigua zona industrial y portuaria, la transformación que Bilbao ha experimentado en las últimas décadas ha convertido el entorno de la Ría en un lugar para el esparcimiento y la cultura, con el Museo Guggenheim Bilbao como buque insignia que, en palabras de Asier, “convirtió a Bilbao en la ciudad del futuro”. En Abandoibarra se mezcla el ‘nuevo Bilbao’, un museo al aire libre poblado por paseos, parques, espectaculares esculturas y edificios surgidos de la imaginación de algunos de los arquitectos más destacados del mundo, con el patrimonio industrial que sigue marcando el carácter de la ciudad.

Una historia que aún se aprecia en los alrededores del Itsasmuseum, un espacio dedicado a contar la historia de la Ría de Bilbao y la relación de Bizkaia con el mar. Allí se puede ver la imponente grúa Carola y los diques en los que se reparaban las embarcaciones que surcaban las aguas de la Ría llenos de mercancías y mineral de hierro. Muy cerca se encuentra también el animado barrio de Olabeaga, conocida como la ‘Pequeña Noruega’ por el carácter marinero de sus coloridas casas, y enfrente, la isla de Zorrotzaurre, epicentro de la transformación que sigue llevando a cabo Bilbao para ser una ciudad de futuro, y en la que conviven propuestas culturales alternativas, testigos del pasado industrial y minero de Bilbao y los proyectos para crear un Bilbao de futuro.

Asier tampoco podía dejar de pasar la oportunidad de acompañar a Melani a una visita al Museo de Bellas Artes de Bilbao, una de las pinacotecas más relevantes de Bizkaia y un lugar donde “encontrar todo el arte clásico que puedas encontrar, y es una joya” que Asier, como buen bilbaíno, visitaba de pequeño acompañado por su madre. Rodeado por el frondoso parque de Doña Casilda, el museo es toda una institución cultural en el Botxo - como se denomina cariñosamente a Bilbao por estar encajada entre montañas -. Entre recuerdos de sus actuaciones en el Teatro Arriaga, otro de los templos de la cultura de Bilbao, Asier y Melani pasean por las salas del museo. Una de las peculiaridades del museo es que la ingente colección que se muestra en las salas no está organizada por épocas o estilos, sino por letras que representan temas monográficos. Así, se puede ver cómo artistas de diferentes épocas, desde el medievo hasta nuestros días, han plasmado diferentes conceptos, permitiéndonos ver como algunos han cambiado y otros, en cambio, siguen inmutables.

En su recorrido para descubrir la esencia de Bizkaia, Asier y Melani se embarcan en un viaje al pasado. En el histórico pueblo de Otxandio, cruce de caminos entre el Parque Natural de Urkiola y el Parque Natural de Gorbeia que conserva su arquitectura histórica, Melani y Asier disfrutan de la esencia de las tradiciones vascas, unas costumbres que se han conservado a lo largo de los sitios y que reflejan la manera de ser de Bizkaia. Allí Melani descubre a la diosa Mari y que son los eguzkilores un símbolo “muy típico, que trae buena suerte y protección” como explica Asier, testimonios de los antiguos mitos de nuestros ancestros que continúan presentes hoy en día.

En el frontón de Otxandio Asier le explica a Melani que el sonido de la pelota de madera, lana y cuero golpeando contra la pared es la banda sonora de los pueblos de Bizkaia, y que la pelota vasca es nuestro deporte rey. Vestidos con auténticos trajes tradicionales, Melani y Asier también pueden disfrutar de las danzas vascas que se pueden seguir disfrutando en festivales y fiestas populares, y practicar el euskera, el milenario idioma que compartimos con todo el pueblo vasco, y descubrir todo un mundo mira al futuro manteniendo al tiempo sus tradiciones y costumbres.

Asier y Melani continúan su aventura por Bilbao Bizkaia subiendo al Gorbeia, la cima más alta del Territorio con sus 1.481 metros de altura, y un lugar cargado de simbolismo desde tiempos remotos. Durante el ascenso entre los prados, bosques de hayas y robles y riscos, Melani y Asier pueden de disfrutar de unas vistas impresionantes, como las del Biotopo Protegido de Itxina, una formación rocosa que se alza desde la montaña como queriendo arañar al cielo que, además de ser un espectáculo para la vista, también alberga una importante variedad natural y es el hogar de muchas de nuestras leyendas.

Haciendo honor a la tradición montañera de Bizkaia, Asier ha ido preparado para la excursión y lleva en su mochila un buen queso de Idiazabal - el que nos dan las ovejas latxas, “las blancas que tienen la cabeza negra” como las que Melani ha visto pastando en las campas del Gorbeia - que, cómo no hace las delicias de Melani. Toda una experiencia para desconectar en plena naturaleza y sentir la esencia de nuestros montes mientras se asciende a la icónica cruz que corona la cima del Gorbeia.

La última parada del viaje de Melani y Asier es el Cantábrico, siguiendo la costa para disfrutar de las playas de arena o de roca que se abren en los verticales acantilados; de islas mágicas en las que se mezclan paisaje y leyenda, como San Juan de Gaztelugatxe “un peñón enorme que sale del medio del mar que juntan la montaña con el risco que da a una ermita” en palabras de Asier, o Garraitz; o de la extraordinaria variedad natural de la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, una paraíso para la vida silvestre y las aves que también es una de las mecas mundiales del surf por su famosa ola izquierda.

El Cantábrico es al mismo tiempo frontera natural y puerta de entrada y salida de Bilbao Bizkaia. Desde los puertos que salpican las costas de Bizkaia, como los de Santurtzi, Algorta, Mundaka, Bermeo, Elantxobe, Lekeitio u Ondarroa, partieron las naves llenas de aventureros y comerciantes siglos atrás, y hasta ellos siguen llegando a día de hoy los barcos pesqueros cargados con los frutos del mar, guiados por faros como el de Matxitxako, en el punto más al norte de todo Bizkaia, o el de Santa Catalina, el único faro visitable en Euskadi.